Ingredientes para 4 personas:
1kg de muslos de pollo de corral
40 gr de miel de castaño Gran Reserva
4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra 2 cebollas
2 dientes de ajo
2 tomates
1 cucharada de ras al hanout
1⁄2 limón marroquí (encurtido)
50 ml de vino de Jerez
2 cucharadas de vinagre
10 orejones
350 ml de caldo de pollo o de verduras
1 cucharadita de mantequilla
Sal
Pimienta
Cous-cous para acompañar
Elaboración
Partimos los muslos de pollo de corral, los salpimentamos y los vamos dorando poco a poco, en una cazuela con aceite de oliva virgen extra.
A medida que tomen un color atractivo los reservamos y continuamos con el resto.
Retiramos el exceso de grasa que pudiera tener la cazuela y allí mismo añadimos la cebolla y el ajo picados. Le ponemos sal y removemos bien para que se despeguen los trocitos de pollo de pudieran haberse quedado agarrados al fondo.
Dejamos que la cebolla se poche durante al menos 15 minutos y agregamos el tomate rallado, esperando a que reduzca su humedad durante 3 minutos más.
Incorporamos las especias –ras al hanout-, la miel de castaño Gran Reserva y el limón marroquí (del que utilizaremos solo la parte de la piel, desechando todo el interior)- cortado en trocitos pequeñitos.
Removemos la mezcla anterior y dejamos a fuego bajo durante 3 minutos para que desprenda bien sus aromas.
Vertemos el vino y el vinagre y cocinamos a fuego vivo durante 2 minutos, hasta conseguir que evapore el alcohol y pierda su acidez.
Por último volvemos a incorporar los trozos de pollo que habíamos dorado al principio, los orejones y el caldo.
Cocinamos a fuego medio hasta que el pollo esté tierno y se desprenda del hueso con facilidad. Este proceso nos llevará unos 35-40 minutos y deberemos añadir más caldo si vemos que lo necesita.
Una vez que la salsa esté bien reducida, retiramos la cazuela del fuego, añadimos la mantequilla y dejamos que se disuelva con el calor residual aportándole aún más brillo.
Emplatado:
Servimos el pollo en el fondo del plato y bañamos generosamente con la salsa moruna de miel y especias. Colocamos los orejones en la parte superior y refrescamos con hierbas frescas al gusto y un poco de piel de limón marroquí encurtido.
De manera opcional podemos acompañarlo con cous-cous.
Una receta de David Monaguillo